Plan de parto: ¿por qué es tan importante hacerlo?

Actualizado en enero 2024
Jade Magdaleno Matrona

Escrito por Jade Magdaleno, matrona

Contenidos certificados

Artículos revisados médicamente

Contenido avalado por profesionales de la salud y el Colegio de Médicos de Barcelona. Consulta aquí nuestra política editorial.

Mujer embarazada junto a médico mirando una tabletEl nacimiento de tu bebé será uno de los momentos más importantes de tu vida y seguramente lo hayas imaginado ya. Aunque es imposible saber al 100% de qué manera transcurrirá todo hasta que llegue ese día, hay muchas decisiones que puedes y debes tomar antes.

Para saber qué opción es la más adecuada para ti, es imprescindible que primero te informes adecuadamente sobre todas las elecciones que podrás hacer y que, a continuación, te explico.

¿Qué es y para qué sirve el plan de parto?

Desde 2002 en España está en vigor la Ley 41/2002, de 14 de noviembre, básica reguladora de la autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación clínica.

En ella se indica que:

Los profesionales sanitarios tenemos la obligación de informar correctamente a la paciente antes de cada intervención. Esta información debe incluir, como mínimo, la finalidad y naturaleza de cada intervención, sus riesgos y sus consecuencias. Solo puede omitirse si el médico considera que informar a la paciente puede ocasionarle grave perjuicio para su salud. En este caso, está obligado a dejar, de manera razonada, constancia escrita en la historia clínica de la mujer y a comunicar esta decisión a sus familiares.

Tras esta información, es la mujer quien otorga, si lo desea, su consentimiento. Absolutamente toda intervención sanitaria requiere legalmente del consentimiento de la mujer (casi siempre basta que sea verbal, aunque en algunos procedimientos, como la colocación del catéter epidural o la donación de la sangre de cordón, son escritos). Por ley, solo puede obviarse si existe riesgo para la salud pública o riesgo grave para la integridad física o psíquica de la mujer y, por ello, no fuera posible conseguir su autorización. En este caso, siempre que sea posible, debe consultarse a sus familiares.

El día del parto estarás expuesta a tantas intervenciones, que lo mejor es que conozcas todas ellas con anterioridad y elijas tranquilamente cuáles prefieres. Esto te permitirá, el día del parto, centrarte únicamente en ti y tu bebé. Acudir perfectamente informada te dará, además, una gran sensación de seguridad y confianza.

Ten en cuenta que, todo consentimiento puede revocarse en cualquier momento. Podrás cambiar de opinión sobre la marcha sin ningún problema.

¿Qué debe incluir el plan de parto?

Mujer embarazada en habitación de hospital, mientras 2 enfermeras miran el plan de partoTen presente que el plan de parto no solo incluye tus deseos para el momento del parto en sí, sino que puede abarcar desde el ingreso en el hospital hasta el alta:

  • Llegada al hospital: ¿Quién quieres que te acompañe o no? ¿Tienes alguna necesidad especial por capacidad, cultura o idioma? ¿Tienes alguna preferencia sobre la sala de parto o equipamiento para el parto? ¿Prefieres usar la ropa del hospital o la tuya? ¿Deseas ser atendida por profesionales en formación?…
  • Trabajo de parto: ¿Se utiliza enema o rasurado antes del parto? ¿Deseas comer o beber? ¿Qué posturas quieres adoptar? ¿Cómo prefieres manejar el dolor? ¿Qué material de apoyo deseas durante el parto (pelotas, espejos, cojines…)? ¿Deseas usar una bañera o ducha?…
  • Intervenciones: ¿Cómo quieres que se controle el estado del bebé durante el parto? ¿Permites los tactos vaginales? ¿Y que se te coloque una vía venosa o se te administre medicación para acelerar el parto? ¿Permites intervenciones como el sondaje vesical o la rotura artificial de la bolsa amniótica?…
  • Expulsivo: ¿Cómo prefieres realizar los pujos? ¿Consientes la práctica de una episiotomía? ¿Qué ambiente, atención y cuidados deseas para tu bebé inmediatamente tras el parto? ¿Deseas piel con piel? ¿Qué harás con el corte del cordón umbilical y su sangre? ¿Darás el pecho y el calostro? ¿Cómo prefieres que sea el alumbramiento de tu placenta? ¿Permites que a tu bebé se le administre medicación rutinaria como la pomada oftálmica, la vitamina K o la vacuna de la hepatitis?…
  • Puerperio: ¿Cómo quieres que sea el traslado a planta con tu bebé? ¿Y la atención y cuidados de ambos durante la estancia hospitalaria? ¿Prefieres que todas las pruebas que le hagan sean en tu presencia?…
  • Situaciones especiales: ¿Qué preferencias tienes si el parto debe ser atendido de manera instrumental o por cesárea?

Cómo hacer un plan de parto

Si a alguna de estas preguntas has respondido “ay… ¡no lo sé!” o “¿pero eso qué es?”, tranquila, es lo más normal. Antes de cada consentimiento va tu decisión. Y, para que puedas hacer esa elección, primero tienes que conocer por qué, para qué y qué pasa si se hace o no se hace, así como todas las alternativas disponibles.

Aunque existen plantillas a modo de guía, la validez legal del plan de parto persiste independientemente del formato escrito o verbal. Te dejo aquí la plantilla que sugiere el Ministerio de Sanidad.

Te pongo algunos ejemplos de preguntas que podrías hacerte:

¿Cómo quieres manejar tu dolor?

Mujer embarazada de pie acompañada de su parejaEn primer lugar, es importante que sepas qué métodos farmacológicos y no farmacológicos se ofrecen, en el hospital que hayas escogido, para el alivio del dolor del parto. Que conozcas las ventajas e inconvenientes de todos ellos y te decantes por lo que prefieras.

Si tú deseas aliviar tu dolor con una bañera de partos, pero ese paritorio no tiene, no formará parte del abanico de opciones… o tal vez prefieras renunciar a eso porque justo ese paritorio sí cumple con todos tus demás requisitos.

Redactar el plan de parto también puede servirte de guía para escoger hospital, eligiendo aquel que cumpla en mayor medida con tus preferencias.

¿Puedes negarte a ser atendida por estudiantes, si el hospital es público y universitario?

¡Totalmente! Da igual cómo sea el hospital, por ley, los estudiantes están obligados a comunicarte que se encuentran en esa situación y tú tienes derecho a consentir o no ser atendida por ellos.

Es más, si deseas preservar al máximo tu intimidad, puedes negarte incluso a que estén presentes en tu asistencia. Eso sí, ten en cuenta que puede que su gran motivación por aprender, propicie que se vuelquen especialmente en ti y puedan favorecer tu experiencia.

¿Y si en el hospital al que vas a ir a dar a luz no aceptan planes de parto?

¡Es ilegal! ¿Imaginas que en una empresa decidan que sus trabajadores no tienen que pagar a Hacienda? ¿O que en una ciudad determinen que allí los niños pueden conducir coches?… Todos los paritorios, públicos o privados, deben cumplir la ley de autonomía del paciente y es de obligado cumplimiento.

¿Y si el hospital tiene un protocolo que no coincida con lo que tú expongas en tu plan de parto? El plan de parto prevalece siempre sobre el protocolo hospitalario, porque se respalda en la ley.

Cuándo y a quién entregar el plan de parto

Basta con entregar el plan de parto cuando ingreses de parto a quien te vaya a atender.

Algunas mujeres prefieren entregarlo durante el embarazo, incluyéndolo en su historia clínica. Para ello, acude o escribe a atención al paciente en tu hospital. Incluso en este caso, te aconsejo que lleves otra copia el día del parto. Hoy en día todo está digitalizado, pero tener tus preferencias “a mano” en papel facilita que todo el equipo tenga más presente tu voluntad.

Recuerda que es normal que te surjan muchas dudas a la hora de redactar un documento con decisiones tan importantes. Apóyate siempre que lo necesites en tu matrona o ginecólogo de confianza.

Conclusiones

Un plan de parto es una herramienta valiosa para las futuras madres y sus parejas, ya que les permite expresar sus deseos, preferencias y necesidades durante el proceso de parto. Aunque el nacimiento de un bebé puede ser impredecible, un plan de parto bien elaborado proporciona una guía clara para el equipo médico y ayuda a crear un ambiente más respetuoso y centrado en la madre y el bebé.

En conclusión, un plan de parto es una herramienta poderosa que permite a las futuras madres tener una mayor participación en su experiencia de parto. Proporciona una forma de comunicación efectiva con el equipo médico, promueve la toma de decisiones informadas y fomenta un ambiente respetuoso y centrado en tus necesidades y las de tu hijo. Al considerar la creación de un plan de parto, las mujeres pueden empoderarse y contribuir a un parto más positivo y gratificante.

También puede interesarte:
Filter by
Post Page
Contenidos médicos Parto y posparto
Sort by
Jade Magdaleno
Jade Magdaleno
Matrona con amplia experiencia en el Hospital Universitario La Paz. Docente en la Universidad Autónoma de Madrid y responsable de los posgrados universitarios para matronas y enfermeras de la Universidad Católica de Ávila.

·····

Si este artículo te ha resultado útil, te agradeceré mucho que lo compartas haciendo clic en alguna de las redes sociales de abajo. ¡Muchas gracias!

¿Te ha resultado útil?
(Votos: 2 Promedio: 5)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio