Escrito por Dra. Clara Muñoz, biomédica
Artículos revisados médicamente
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Si ha llegado el momento de hacértela y tienes dudas, no te preocupes, en este artículo te lo explicamos todo, desde por qué es tan importante y qué se puede saber con ella, hasta por qué el médico te ha programado también una analítica de sangre y cómo tienes que ir preparada.
¿Qué encontrarás en esta guía?
- 1 ¿Qué es la ecografía de la semana 12?
- 2 ¿Cuál es el objetivo de la ecografía de la semana 12?
- 3 ¿Se hace por vía abdominal o vaginal?
- 4 ¿Qué es el triple screening?
- 5 ¿Qué aspecto tiene un embrión de 12 semanas?
- 6 ¿Necesito algún tipo de preparación para la realización de la ecografía del primer trimestre?
- 7 Conclusiones
¿Qué es la ecografía de la semana 12?
La ecografía de la semana 12 es una de las más importantes en la valoración y seguimiento del embarazo (junto con la de la semana 20 y la de la semana 36). Se lleva a cabo entre las semanas 11 y 13, etapa en la que el feto está en plena formación de todos sus sistemas y órganos y ya es lo suficientemente grande para poder apreciar su desarrollo.
Esta ecografía arroja datos muy relevantes sobre el desarrollo del bebé que pueden ser clave para la detección de posibles anomalías cromosómicas y morfológicas, entre otras cosas.
Hay que tener en cuenta que, en las ecografías, no todo es detectable e incluso la mujer firma un consentimiento informado de que asume que esto es así.
Dra. Raquel Jiménez, ginecóloga y obstetra
¿Cuál es el objetivo de la ecografía de la semana 12?
Como hemos mencionado, la principal función de esta prueba es observar cómo está el bebé y detectar a tiempo posibles problemas de su desarrollo.
A través de esta ecografía se puede obtener la siguiente información:
- Comprobar la edad gestacional. Aunque el embarazo se cuenta desde la fecha de la última regla, no todas las mujeres ovulan en el mismo momento del ciclo, de manera que esta prueba sirve para estimar el tiempo real de gestación calculado según la longitud cráneo-rabadilla o cráneo-caudal del feto.
- Confirmar la vitalidad embrionaria. Se comprueba si existe latido cardíaco.
- Conocer el número de embriones. En esta ecografía se puede saber si se trata de un solo embrión o es un embarazo múltiple. Y, en este último caso, cuántos embriones hay y si comparten la placenta o la bolsa.
- Comprobar el riesgo de anomalías cromosómicas. Entre otras cosas, el ecografista observará y medirá el pliegue nucal, para luego cruzar este dato con otros en el triple screening y calcular así el riesgo de cromosomopatías.
- Detectar anomalías morfológicas. Aunque parece pronto, el bebé ya se está formando y, por tanto, ya hay algunas anomalías que pueden ser detectables: ventriculomegalia, holoprosencefalia, anencefalia, cardiopatías estructurales, onfalocele, agenesia renal, megavejiga, alteraciones faciales y alteraciones en el tamaño de las extremidades.
- Detectar el riesgo de preeclampsia. La preeclampsia es una enfermedad del embarazo que se produce por un problema (aún no identificado) durante la formación de la placenta y se manifiesta en tensión alta y alteraciones en varios órganos del cuerpo, a la vez que afecta al aporte de oxígeno y nutrientes a la placenta y también al bebé en crecimiento.
Obtenemos muchos datos que nos permiten valorar si las cosas van bien y tienen una buena proyección de futuro, aunque siempre pueden darse complicaciones, porque, desgraciadamente, pueden haberlas en cualquier momento.
Dra. María Jesús Cancelo, ginecóloga y obstetra
¿Se hace por vía abdominal o vaginal?
Al ser una etapa temprana en el embarazo, esta ecografía puede llevarse a cabo tanto por vía vaginal como por vía abdominal.
La diferencia entre los dos métodos está en que:
- Con la sonda en el abdomen, se pueden obtener planos más amplios, pero con poca resolución.
- Mientras que, al hacerla por vía vaginal, los planos son más limitados (están condicionados al recorrido de la sonda), sin embargo, las imágenes son mucho más nítidas.
La decisión de qué sistema emplear depende del ecografista y, en ocasiones, si este lo considera oportuno, puede, incluso, combinar ambas.
¿Qué es el triple screening?
El triple screening, también llamado cribado de cromosomopatías, es un estudio que se realiza junto con la ecografía de la semana 12. Para ello, coincidiendo con la ecografía, el médico te solicitará una analítica de sangre.
Este cribado consiste en una estimación de las probabilidades de que el feto esté afectado de Síndrome de Down (trisomía 21), Síndrome de Edwards (trisomía 18) o Síndrome de Patau (trisomía 13), cuyo cálculo se hace teniendo en cuenta tres indicadores:
- La edad de la madre, ya que cuanto más mayor sea, más riesgo hay.
- Los niveles en sangre de la hormona beta-hCG libre y la proteína PAPP-A, fabricadas por la placenta.
- La translucencia nucal. Durante la ecografía, el especialista mide el engrosamiento del pliegue de la nuca, situado en la parte posterior de la cabeza del feto.
El triple screening, no obstante, solo es un cálculo matemático que mide un índice de riesgo, no arroja resultados concluyentes ni establece un diagnóstico.
En todo caso, si ese índice nos dice que el riesgo es alto (si es mayor o igual a 1/250 para la trisomía 21, 13 o 18), se procedería a realizar otros exámenes más precisos que sí podrían descartar o confirmar el riesgo como un test de ADN fetal en sangre materna o pruebas de carácter invasivo, como una amniocentesis o una biopsia corial.
¿Qué aspecto tiene un embrión de 12 semanas?
A las 12 semanas, el aspecto de tu bebé empieza a asemejarse al de un recién nacido. Sus órganos vitales ya se han formado y podrás distinguir su cabeza, que empieza a redondearse, su tórax, su abdomen y sus extremidades (pies y manos ya se están desarrollando).
En esta etapa mide entre 60 y 70 milímetros y tiene un peso aproximado de 9 a 14 gramos (cabría en la palma de tu mano). Está rodeado de una gran cantidad de líquido amniótico y se mueve bastante, es posible que lo veas dando patadas, sacudiendo los brazos o incluso la cabecita.
Si es posible, recomiendo que se haga una ecografía antes de la de la semana 12. Y es que en el caso de que suceda algo, es mejor comprobarlo cuanto antes. Considero que hacer una primera ecografía en la semana 9 sería lo más adecuado.
Dra. Raquel Jiménez, ginecóloga y obstetra
¿Me dirán si el bebé es niño o niña?
A las 12 semanas los genitales del bebé ya han terminado de formarse, por lo que hay posibilidades de que en esta ecografía ya puedas conocer su sexo. Sin embargo, en algunas ocasiones puede que no sea fácil verlo o que, lo que creamos ver, no sea del todo fiable. Aún así, hay varias maneras de saber el sexo de tu bebé según el momento de la gestación en el que estés.
Aunque puede revelarse el sexo del bebé, en esta ecografía no es lo que más nos importa a los especialistas. Lo que en realidad revisamos son todas las estructuras del feto, las de la placenta, el vaso y los líquidos amnióticos. Se revisa todo y, en ocasiones, el sexo del bebé no se llega a ver, pero no es lo más importante de esta ecografía.
Dra. María Jesús Cancelo, ginecóloga y obstetra
¿Necesito algún tipo de preparación para la realización de la ecografía del primer trimestre?
La ecografía de la semana 12 no requiere ningún tipo de preparación especial, siempre y cuando el médico no te indique lo contrario.
Ten en cuenta que, aunque la analítica para medir la B-HCG y la PAPP-A no requiere estar en ayunas, podría darse el caso de que se incluyan otras mediciones que sí lo necesiten. Para estar segura, te aconsejamos que lo consultes.
No obstante, si no te indican nada más, la única recomendación para la ecografía es que no te apliques cremas, aceites o lociones en el abdomen durante las 48 horas previas a la prueba, porque podrían entorpecer la prueba.
Conclusiones
La ecografía de la semana 12 es una de las pruebas más importantes del embarazo. Esta prueba permite observar el estado y desarrollo del feto y, combinada con el triple screening, permite detectar posibles anomalías cromosómicas.
Además, es la primera en la que tendrás la oportunidad de ver a tu bebé con un aspecto más parecido a un recién nacido (aunque mucho más pequeñito), escuchar el latido de su corazón y, si es posible y quieres, conocer su sexo.
Recuerda que, tendrás que hacerte algunas ecografías más durante tu embarazo, y aquí te explicamos cuántas son y para qué sirven.
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